El purín bien gestionado y su valor ambiental
El purín producido en las explotaciones ganaderas intensivas es uno de los grandes impactos ambientales que generan este tipo de granjas. Tradicionalmente, su uso se destina a su aplicación como abono orgánico en las fincas agrícolas. De hecho, toda granja, antes de construirse, debe tener diseñado un plan para resolver el impacto ambiental de sus purines y, posteriormente, debe apuntar en su cuaderno de campo qué cubas de purín saca y dónde las aplica.
Paralelamente, el actual gobierno de la Comisión Europea ha establecido el Pacto Verde como principal objetivo para su mandato, cuyo fin es reducir las emisiones de efecto invernadero de cara a frenar el cambio climático. Dentro de dicho Pacto Verde se encuentra el documento ‘De la granja a la mesa’, donde se propone una reducción del uso de fertilizantes químicos en la agricultura, en favor de los fertilizantes orgánicos, es decir, de los estiércoles o purines.
“El purín, aparte de su origen orgánico, se puede considerar un fertilizante de proximidad, con lo cual la huella de carbono del transporte y de la energía que genera es menor que en los abonos químicos”, afirma el promotor de Agroxcontrol, Juan López Plumed. Por otra parte, este también indica la importancia de la sostenibilidad económica en el sector agrario, ya que, según valorizatupurin.com, «una granja tipo de 1.000 cerdos puede generar un ahorro en fertilizante de 17.000 euros al año».
Digitalizar el uso del purín
El gran reto en la gestión del purín es hacerlo bien, “porque hay tantos tipos de purín como tipos de ganaderos y días del año”, añade López Plumed. Por ello, recomienda que antes de aplicarlo hay que analizar el contenido de cada cuba, planificar en qué finca se va a aplicar dicho purín y hacerlo de forma medida, ajustada y correcta. Todo ello se consigue de forma sencilla con Agroxcontrol, que actualmente ya está homologada por la Generalitat de Cataluña para la gestión GPS de los purines y que ha recibido varios premios en Figan y en Sima de París.
El sistema almacena en la nube los datos de la granja de donde se obtiene el purín como el recorrido realizado con la cuba o el producto que está dentro de la cisterna. Posteriormente, regula de forma automática el nitrógeno por hectárea que va a aplicar. La información se informatiza y facilita la burocracia que solicita la administración pública, como la gestión del cuaderno de campo.
Así, Agroxcontrol permite la gestión integrada y sostenible de los purines por todos los actores del sector: agricultores, ganaderos, gestores de purín e integradoras.
fuente: https://www.heraldo.es/branded/agroxcontrol-el-purin-bien-gestionado-y-su-valor-ambiental/